Una de las universidades en quiebra durante los ' 90, precarizada al extremo durante los ´80s y ´90s, que retoma rumbo, invierte nuevamente en infraestructura, y abre un camino de lo que significa hacer universidad, en una región repleta de alternativas privadas. Buena vida universitaria, aun sin ser tantos estudiantes como en las universidades ubicadas hacia la zona central, el ambiente lluvioso, el olor a tierra mojada, y el infinito verde que la rodea, genera un clima agradable, con instalaciones acordes a la realidad regional y docentes comprometidos con tu aprendizaje.  No es la mejor, pero es un excelente referénte regional.

Estudié en horario Vespertino. Considero que como alumno la Univ. te entrega las herramientas para formarte como profesional. En esta formación nosotros mismos somos la parte escencial, ya que somos los interesados en sacarle provecho a lo recibido y seguir profundizando si nos interesa. Lo mejor fue poder aterrizar el conocimiento recibido con experiencias pasadas y presentes en el trabajo. A todos mis profesores "muchas gracias!" por su dedicación, tiempo y predisposición. Gracias Universidad de Los Lagos por complementarme en ser el profesional que soy hoy.